sábado, 13 de mayo de 2017

¿Te acuerdas de Josip Simunic?



- La fortaleza croata se llama Josip Simunic, un defensa central que actuó para el combinado arlequinado entre 2001 y 2013. Pero este jugador no nació en tierras balcánicas, ya que sus padres -de origen bosniocroata- se trasladaron a Australia, donde el 18 de febrero de 1978 nacería Josip en la ciudad de Canberra.
Sus progenitores vivieron mucho tiempo en la aldea de Otigošće, cerca de Fojnica (Bosnia & Herzegovina), cuando ésta pertenecía a la antigua Yugoslavia. En tierras oceánicas Josip recibiría sus primeros entrenamientos hasta convertirse en un centralazo de 1´95 cm de estatura.

Desde bien joven ingresó en la Australian Institute of Sport, y recibió una correcta formación que le abriría las puertas del Melbourne Knights, destacado equipo oceánico con el que acabaría debutando profesionalmente en 1995.

Después de dos temporadas en el conjunto de Melbourne, Simunic jugaría en el Carlton S.C., último equipo australiano antes de partir a Alemania para fichar por el Hamburgo.
El zaguero croata tuvo que trabajar duro para debutar en una liga tan exigente como es la Bundesliga. Sus condiciones como central ya eran bastante vistosas. Simunic era un jugador de los que nunca perdían la marca, ordenado y muy disciplinado. Era una torre infranqueable que con el paso del tiempo acabaría por sorprender a muchos ojeadores, pese a que sus inicios en el equipo filial del Hamburgo tuvo que trabajar muy duro para llegar a la primera plantilla.

De la Bundesliga solamente disputó ocho encuentros, y finalmente acabó jugando para el segundo equipo de Volksparkstadion, hasta romper su vinculación con el club en 1998. Por entonces ya contaba con muchas novias para seguir jugando en Alemania, y el Hertha BSC consiguió hacerse con sus servicios.

En la disciplina de Berlin pasaría nueve temporadas en las que engrandeció su figura hasta convertirse en internacional por Croacia. Durante todo ese tiempo figuró como uno de los defensores más destacados de la liga alemana, completando unos números de 222 partidos en los que marcó tres goles.
Josip Simunic finalizaría su contrato con el Hertha en 2009 y posteriormente ficharía por el Hoffenheim, donde pasaría otras dos campañas jugando en la Bundesliga manteniendo un magnífico nivel. El croata ya era un jugador archiconocido, un defensa admirado por los más futboleros cuya experiencia internacional había crecido considerablemente.

En 2011 se marchó a la tierra en la que por circunstancias no pudo nacer y estampó su firma con el Dinamo de Zagreb. En la Prva HNL estuvo compitiendo durante tres temporadas antes de decir adiós al fútbol como jugador. Después quiso seguir ligado a este deporte como asistente de la selección croata.

Simunic participó en dos Mundiales y dos Eurocopas, teniendo un papel importante en  la Euro 2008.

- Simunic pudo jugar internacionalmente con Australia, pero finalmente optó por representar a la selección de Croacia. Sus padres eran bosnios de etnia croata y eso motivó a Josip para jugar con un equipo al que representó 105 veces y con el que hizo tres goles, siendo su debut un 10 de noviembre de 2001 en un partido amistoso ante Corea del Sur.

Nos hemos acostumbrado a ver a Simunic en el eje de la zaga de Croacia, con la que participó en los Mundiales de Corea-Japón 2002 y Alemania 2006, además de las Eurocopas de Portugal 2004 y Austria-Suiza 2008. En ésta última tuvo un papel bastante importante figurando como uno de los pilares fundamentales del combinado ajedrezado.

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