jueves, 30 de noviembre de 2017

De cerca: Ardin Dallku.



- En el caso de este futbolista, todo queda en familia, ya que su padre Sabit Dallku ya jugó para la extinta selección yugoslava, mientras que su hermano mayor Armend -ya retirado- jugó para la selección de Albania. De momento, Ardin ya consiguió actuar para la nueva selección de Kosovo, con la que debutó recientemente en algunos amistosos.
Su trayectoria a nivel de clubes aún es muy corta, ya que tras pasar varios años formándose en las secciones menores del F.C. Prishtina dio el salto a la liga ucraniana jugando para el Vorskla Poltava, al que llegó en 2016.

Ardin Dallku nació en la ciudad kosovar de Vučitrn, situada en el distrito de Mitrovica, el 1 de noviembre de 1994. Posee las nacionalidades de Serbia, Albania y Kosovo, pero finalmente fue el último país al que quiso representar a nivel de selecciones.

Dallku es un jugador de perfil defensivo, un defensa central contundente capaz de jugar ligeramente más adelantado, como mediocentro defensivo. Sin embargo, el zaguero kosovar ha sabido destacar más en el eje de la defensa, lo que le ha llevado a tener sus mejores actuaciones sobre el césped gracias a su persistencia.
En los marcajes es muy sólido, un tipo duro que actúa con firmeza en cada jugada de riesgo. Su valentía no tiene límites y, pese a no ser un jugador muy técnico, cumple perfectamente en la zaga sin complicarse demasiado.

Pese a tener varios pasaportes, Dalllku desarrolló todos sus inicios en su Kosovo natal. Mientras cumplía con otras obligaciones, el joven defensor jugaba al fútbol de forma amateur hasta conseguir entrar en las secciones inferiores del F.C. Prishtina, uno de los clubes más prestigiosos perteneciente a la capital kosovar.

Sus primeros pasos fueron tan evidentemente buenos que no le costaría llegar al primer equipo, algo que conseguiría en el último tramo de su estancia en la entidad de Rexhepi Stadium. Pero aún no se daba por concluida su formación juvenil cuando ya surgieron ofertas para que Dallku cambiase de aires.
El zaguero puso rumbo a Ucrania para firmar contrato con el Vorskla Poltava el 10 de enero de 2012. Su estancia inicial sería para seguir desarrollándose en el sistema juvenil del club, llegando a jugar para el equipo filial.

Después de cuatro temporadas completando su ciclo formativo, el joven balcánico acabaría asistiendo a sus primeras sesiones de entrenamiento con la primera plantilla del equipo de Poltava. El 1 de julio de 2016. Dallku ascendió al primer equipo.

Tampoco tardaría mucho en estrenarse en la máxima competición ucraniana. Habiendo jugado aún para el equipo B del Vorskla, Ardin fue llamado para intervenir en su primer partido como profesional el 10 de diciembre de 2016, en un partido liguero frente al Volyn Lutsk, en el que el kosovar tuvo minutos.
Poco a poco fue asistiendo a más encuentros hasta que se instaló definitivamente en el primer equipo. No le costó hacerse con la titularidad, y hasta la actualidad ya ha intervenido en más de una treintena de partidos, en los que además hizo un gol.

Su gran paso por la competición ucraniana le permitió convertirse en jugador internacional con el equipo nacional de Kosovo. Dallku ya lleva dos temporadas en muy buena forma, viviendo sus mejores años con el conjunto de Butovsky Vorskla.

Vemos a Ardin Dallku en una sesión de entrenamiento con la selección de Kosovo.

- De momento es joven y no posee experiencia juvenil con las secciones inferiores de ninguna selección nacional. Pudo representar a Serbia o Albania, ya que el zaguero balcánico posee ambas nacionalidades además de la kosovar. Finalmente fue invitado a participar con Kosovo en el 28 de agosto de 2017.

Dallku tuvo la opción de medirse a selecciones como la de Croacia y Finlandia en partidos oficiales de clasificación  para el Mundial de Rusia 2018. No obstante, Ardin tuvo que aguardar hasta el 13 de noviembre, momento en el que se estrenó internacionalmente jugando en un partido amistoso frente a Letonia.

miércoles, 29 de noviembre de 2017

¿Te acuerdas de Miran Pavlin?



- Mediocentro que sumó un gran número de internacionalidades con la selección de Eslovenia, siendo uno de los primeros mundialistas de su país al asistir a la Copa del Mundo de Corea-Japón en 2002. También tuvo el honor de defender al equipo esloveno en su primera Eurocopa, en la de Bélgica-Holanda 2000, donde además tuvo un destacado papel.
Empezó jugando en el Olimpija y acabó jugando en una de las mejores ligas europeas a su paso por clubes como el Freiburg o el Karlsruher. También tuvo un breve paso por el Oporto y probó fortuna en la liga chipriota.

Miran Pavlin nació en Kranj (Eslovenia), el 8 de octubre de 1971. Sus primeros pasos los dio en un destacado club de su localidad natal, el Triglav. En esta entidad empezó a formarse antes de dar el salto profesional para jugar en la recién creada Prva SNL. Es el tío de Luka Pavlin, otro profesional del fútbol esloveno.

Su labor era la de jugar siempre por el medio del campo, como pivote defensivo u ofensivo. Se hartaba a recuperar balones y a repartir juego, siendo un jugador muy eficaz en las tareas de contención gracias a su brega y entrega.
Tenía mucha técnica, a veces desaprovechada por las exigencias de su demarcación, en la que siempre tuvo que emplearse con dureza y rapidez. No obstante, siempre se le vio ese talento que le llevó a ser internacional y a competir en los más altos eventos del fútbol. A Pavlin le sobraba calidad, tenía gol y era un gran asistente.

De formarse en el Triglav pasaría a jugar en el Živila Naklo, con el que ya debutaría en la máxima división eslovena. Con esta escuadra tuvo treinta apariciones y marcó sus primeros ocho goles como profesional, lo que le valió para llamar la atención de muchos clubes.

Antes de animarse en sus primeros pasos por el fútbol extranjero, Miran jugó para el Olimpija de Ljubljana, donde estuvo tres años jugando a muy buen nivel mientras sumaba sus primeras actuaciones con la selección nacional de Eslovenia.
Hizo nueve tantos en 71 participaciones y su progreso fue seguido de cerca por varios clubes extranjeros. El medio esloveno decidiría marcharse a Alemania para incorporarse al Dynamo de Dresden, donde jugó durante el curso 1996\97.

Tras dar sus primeros pasos por el fútbol alemán, Pavlin se incorporó a la dinastía del S.C. Freiburg, equipo en el que permaneció tres temporadas consiguiendo cinco tantos en 61 partidos de la afamada Bundesliga.

En su último año de contrato con el club de Friburgo de Brisgovia, Miran jugó cedido para el Karlsruher, equipo en el que jugaría a finales de los noventa cumpliendo con sus últimos partidos en la liga alemana antes de probar suerte en Portugal.
Una vez en tierras lusas, Pavlin confirmó su fichaje por el Oporto, con el que tuvo doce apariciones y marcó un gol en sus dos años de estancia, en medio de sus dos últimas importantes citas internacionales con la selección de Eslovenia.

Regresó a su país en 2002 y volvió a jugar para el Olimpija, de donde posteriormente pasaría a jugar para el Olympiakos Nicosia en la liga chipriota y después en el Apoel. Una vez más regresaría al Olimpija para cerrar cuatro temporadas de más a menos, dejando el club en 2009 para incorporarse al Koper, donde ejerció como entrenador-jugador ayudando en la conquista de la Prva SNL. En 2010 decidió retirarse como futbolista.

Además de participar en la Euro 2000, Pavlin jugó con Eslovenia en la Copa del Mundo de Corea-Japón.

- Pavlin jugó 63 partidos internacionales con la selección eslovena, siendo uno de los pioneros del nuevo equipo balcánico que empezaría a competir desde comienzos de los noventa. Tras jugar para la sección Sub-21, el mediocampista tuvo sus primeras apariciones a partir de 1994, preparándose para vivir sus primeras citas importantes, también las primeras del equipo nacional esloveno.

Miran Pavlin acudió al Mundial de Corea-Japón 2002 tras haber competido en la Eurocopa dos años atrás. Durante su experiencia internacional marcó cinco goles, el primero de ellos el 17 de noviembre de 1999, en un parido contra Ucrania que acabó con empate a uno.

jueves, 23 de noviembre de 2017

De cerca: Enis Bardhi.



- Jugador muy deseado -incluso por muchos clubes grandes de Europa- al que conocemos desde su llegada a España para fichar por el Levante U.D. Su juventud no le ha impedido colarse en una de las ligas más fuertes de Europa, en la que hasta la actualidad ya ha sumado cuatro goles pese a no jugar como nueve puro.
Aún no tiene mucha experiencia internacional, pero está claro que lo de este mediocampista va para largo con el equipo nacional de Macedonia, con el que ya vio puerta en sus once citas con la selección balcánica.

Enis Bardhi (Енис Барди en cirílico) nació en la capital macedonia de Skopje el 2 de julio de 1995. Lo dicho, para ser tan joven ya es un jugador muy experimentado, ya que además de la española, ha jugado en las ligas de Hungría y Suecia, además de tener un breve paso por Dinamarca para jugar en las secciones menores del Brondby.

Su mayor atractivo parece estar en los lanzamientos de libre directo, algo muy típico en los futbolistas de origen balcánico, siempre tan técnicos y eficaces. Con su diestra es capaz de poner el balón allá donde no puede llegar el portero, aunque también sabe fabricar goles sin necesidad de parar el esférico.
Es mediapunta, un centrocampista que puede actuar como volante o pivote defensivo, e incluso se le ha llegado a ver como segundo delantero. Además de su exquisita técnica, el joven macedonio es un gran regateador con visión de juego, un motor de crear fútbol.

Comenzó su formación jugando en el Shkupi, un moderno club de la capital macedonia del que se marcharía en 2013 para ingresar en las divisiones menores del Brondby danés. Poco menos de medio año duró en Dinamarca, ya que desde Suecia llegaría una oferta para entrar a formar parte del KSF Prespa Birlik.

Bardhi completó su formación con ese conjunto sueco en el que pasaría un año mientras seguía jugando para los equipos juveniles de la selección macedonia. En su única temporada con el Prespa Birlik participó en diez partidos de la Allsvenskan, ayudando con sus cinco goles a que el equipo evitase la pérdida de categoría.
Sus buenos progresos despertó el interés de más clubes, así que apareció una oferta del fútbol húngaro por parte del Újpest F.C. a cuya plantilla se unió en el verano de 2014 tras pasar las pertinentes pruebas médicas.

Hizo su debut para el club magiar el 14 de septiembre, en un partido de liga frente al Videoton que acabó con derrota por 2-0. Poco a poco llegarían los goles y las buenas actuaciones del mediocampista, que durante sus tres años ligado al Újpest hizo un total de diecinueve goles.

En el mes de julio de 2017 apareció el Levante para llevarse a la perla del fútbol macedonio. Enis hizo la pretemporada con este club ascendido recientemente a Primera y sorprendió desde sus primeras apariciones.
Desde la directiva levantina tuvieron que actuar rápido, ya que varios equipos habían visto sus acciones y pretendían llevárselo. Algunos clubes de la Bundesliga ya habían preguntado por él. así que se decidió elevar su cláusula a 25 millones para despejar cualquier duda.

Bardhi debutó en Primera el 21 de agosto, en el derbi mediterráneo que finalizó con victoria de 1-0 para los suyos. El macedonio ha tenido unos inicios estelares en la "Liga de las Estrellas", en la que de momento suma ya cuatro goles.

El macedonio Enis Bardhi celebra su primer gol con Macedonia, anotado ante Liechtenstein.

- En su selección nacional ya empieza a figurar como una de las mayores esperanzas del fútbol macedonio. Enis Bardhi ha venido participando desde 2013 con las secciones inferiores del equipo nacional balcánico, al que rápidamente ascendió para formar parte de una primera plantilla en la que ya ha sumado su primer gol en once partidos.

Bardhi es de ascendencia albanesa y finalmente optó por representar al combinado macedonio pese a que al principio se dejó querer por Albania. Desde el 27 de marzo de 2015 viene jugando para el equipo absoluto, en el que espera continuar como uno de sus jugadores más importantes.

miércoles, 22 de noviembre de 2017

¿Te acuerdas de Djordje Jokic?



- Es uno de esos últimos futbolistas en defender un país roto, una Yugoslavia defendida ya por pocos y que derivó en un equipo nacional llamado Serbia & Montenegro, el cual tampoco duraría mucho tiempo a causa de la separación montenegrina. Djordje Jokic (Đorđe Jokić o Ђорђе Јокић) fue uno de sus últimos representantes.
A nivel de clubes desarrolló toda su carrera entre Rusia y Serbia, jugando para equipos como el OFK de Belgrado, la Vojvodina y el Torpedo de Moscú, entre otros. Finalizó su carrera profesional con 349 partidos en los que marcó 18 goles.

Jugaba como defensa y nació el 20 de enero de 1981 en Raška, un municipio situado en la Serbia Occidental. Sus primeros pasos los dio en la cantera del F.K. Bane, fábrica de la que salieron otros talentos serbios como Milan Dudic o Miroslav Vulicevic.

En aquella localidad se crió y se formó como futbolista. Aprendió de sus técnicos aquellos consejos básicos tan útiles para poder escalar peldaños en el mundo del fútbol. Pero la clase de Jokic estaba muy por encima de muchos consejos, pues poseía una calidad innata que en poco tiempo le convertiría en internacional con la selección sucesora de Yugoslavia, en la que este defensa central participaría primeramente como jugador en ciclo formativo.

Defensa seguro, con porte y buen juego de piernas, Djordje acabó abriéndose paso en las filas titulares del conjunto de Raška, en el que había entrado a finales de los noventa para darse a conocer en la Superliga serbia.

Con el Bane no tardaría en destacar. Aguardó la mínima oportunidad para convertirse en el jefe de la defensa y en su segundo año ya llamaba la atención de muchos ojeadores. Durante dos campañas participó en 38 partidos ligueros en los que sumó sus dos primeros goles como profesional, y en los comienzos del nuevo milenio ya cambiaría de aires.
El oficioso zaguero se incorporó al OFK de Belgrado en el año 2000. En este histórico club consiguió darse a conocer por sus lecciones de maestría en defensa, permaneciendo cuatro años en la capital serbia que le servirían para convertirse en internacional.

En esos cuatro años dejó unos registros de 111 partidos y cuatro goles. Entre su rendimiento en la liga serbia y sus primeras actuaciones con el equipo nacional, Jokic ya contaba con una buena fama que le llevaría a tener sus primeras experiencias en el fútbol extranjero.

Se incorporó al Torpedo de Moscú en 2005 para conocer la Premier rusa, en la que en poco tiempo debutaría para acabar formando como titular en la zaga del conjunto moscovita. Con el Torpedo acabaría jugando un total de 72 partidos y marcó tres tantos.
Después de poco más de dos temporadas en la capital de Rusia, el central de Raška se trasladó a la ciudad siberiana de Tomsk para fichar por el F.C. Tom, en el que pasaría los tres siguientes años de su carrera manteniendo el buen nivel.

Después de más de un centenar en la liga rusa con el Tom Tomsk, el defensor serbio quiso probar suerte en el Dinamo Bryansk, pero su mala suerte con las lesiones y la falta de oportunidades le harían volver a su país natal en 2012 para incorporarse a la Vojvodina, donde jugaría durante una temporada más antes de anunciar su retirada del fútbol tras participar en sus últimos veinte partidos en la nueva liga serbia.

Tras participar con Serbia & Montenegro en las Olimpiadas de 2004, Jokic debutó con el equipo absoluto.

- Fue más amplia su experiencia internacional con las categorías inferiores de Serbia & Montenegro que su breve estancia en el equipo de mayores. Jokic jugó para las secciones serbomontenegrinas Sub-21 y Sub-23 completando unos registros de diecisiete partidos en los que nunca pudo hacer gol. Después participaría con el equipo nacional en los Juegos Olímpicos de Atenas 2004.

Poco después de participar en las Olimpiadas, el zaguero balcánico tendría la oportunidad de jugar para el equipo nacional absoluto. Participó en cuatro partidos entre 2004 y 2005, pero después no volvería a tener más apariciones internacionales.

jueves, 16 de noviembre de 2017

De cerca: Nemanja Nikolic.



- Tuvo sus oportunidades con la selección de Montenegro tras encontrar sus oportunidades con el Estrella Roja. Mientras tanto, este mediocampista fue escalando peldaños en las secciones inferiores de la "Crna Gora" hasta lograr su estreno con el equipo absoluto.
Y eso que durante su estancia en el Estrella Roja empezó a jugar para varios clubes como préstamo. Posteriormente estuvo jugando para el OFK Beograd, de donde pasaría a jugar en la Vysshaya bielorrusa para el Dinamo de Minsk y luego lo intentó en Israel para jugar en equipos como el Hapoel de Tel Aviv.

Nemanja Nikolic (Немања Николић) nació en Titograd (Montenegro), el 1 de enero de 1988. Sin embargo su carrera deportiva empezó a tomar sus inicios en las filas del Estrella Roja, uno de los clubes más históricos desde los tiempos de la vieja Yugoslavia.

Raras veces podremos verle jugando en banda, ya que es más bien un jugador de la medular, un todoterreno que bien puede actuar como medio de contención o ligeramente más adelantado, como volante ofensivo.
Pero su mayor rendimiento lo ofrece cuando juega en su perfil más defensivo, en el que el montenegrino se emplea con brega y rapidez para recuperar todos los balones que pasen por delante de él. Es un perro de presa que no deja pasar a un contrincante sin tener que medirse a su talento y eficacia defensiva.

A finales de los noventa entró en las categorías menores del Estrella Roja de Belgrado, pasando por sus secciones inferiores formándose durante ocho años. Empezó a destacar en el equipo filial antes de empezar a entrenarse con el primer equipo, aunque su mayor experiencia como profesional la adquirió jugando cedido en otros clubes.

Nikolic se fue cedido en 2006 al Zlatibor Voda, con el que conseguiría debutar en la Superliga serbia. Con este equipo tuvo un gran protagonismo como titular con apenas dieciocho años. Participó en 26 partidos de liga en los que marcó un par de goles.
En vista de su éxito, la directiva decidió enviarle a Montenegro para jugar en el OFK Grbalj, con el que mantuvo bien alta su reputación. Tampoco le fue mal en el Spartak Subotica, donde estuvo durante la campaña 2010\11 tras haber tenido varias oportunidades con el Estrella Roja, con el que había jugado 25 partidos antes de abandonar la escuadra belgradense.

El montenegrino se marchó de la disciplina rojiblanca habiendo triunfado en la mayoría de equipos para los que jugó cedido. Había conseguido participar en sus primeros partidos internacionales con Montenegro, pero aún no era el momento de abandonar la capital serbia.

Durante dos campañas jugó para el OFK Beograd, equipo al que había llegado en 2011 y donde tuvo buenas acciones en la liga serbia. Participó en más de cincuenta partidos y mostró su lado más goleador al hacer cinco dianas. Muchos clubes preguntarían por el talento balcánico, que en 2013 partiría a Bielorrusia para jugar dos años en el Dinamo de Minsk.
Debutó en la Vysshaya League y completó 53 partidos a un nivel sensacional, lo que le llevó a formar parte del mejor equipo del país, el Bate Borisov. Nikolic no tuvo tanta suerte con esta escuadra, ya que ni pudo terminar la temporada 2015\16.

Luego llegó su primera experiencia por la liga hebrea jugando para el Hapoel de Tel Aviv, de donde posteriormente pasó a fichar por el Voždovac y así completar la campaña 2016\17. Abandonó Serbia y retornó a Israel para incorporarse al Hapoel Raanana, equipo para el que juega actualmente.

Después de jugar varias veces para el equipo Sub-21, Nikolic empezó a jugar para el equipo absoluto. 

- Nemanja Nikolic estuvo jugando para la selección Sub-21 de Montenegro entre 2008 y 2011. Participó en once goles y marcó un gol, algo que aún no consiguió con el equipo absoluto, con el que ya compitió en trece ocasiones.

Debutó con el equipo absoluto en el mes de agosto de 2009, pero no tuvo muchas más oportunidades desde que abandonó tierras balcánicas para emprender nuevas aventuras por el extranjero. Aún tiene tiempo para recuperar su papel internacional, pero la selección montenegrina cuenta cada vez con futbolistas de gran talento. No será tan fácil para Nikolic.

miércoles, 15 de noviembre de 2017

¿Te acuerdas de Nikola Jerkan?



- Otro viejo conocido de la Liga Española que jugó en las filas del Real Oviedo, un equipo al que respeto y admiro pese a que soy un celtista empedernido. Este jugador siempre fue de esos que me decían algo, el típico balcánico que sorprendía por su forma de jugar al fútbol, más sencilla, pero competitiva y eficaz. En el conjunto ovetense coincidió con otros ex-yugoslavos como Nenad Gracan, Janko Jankovic, Robert Prosinecki y Dimitrija Stojkovski, entre otros.

Por aquel entonces era muy normal ver jugadores balcánicos en nuestra liga, ya que la guerra yugoslava obligó a que muchos futbolistas salieran de las diferentes regiones balcánicas. Nikola Jerkan nació en Split (Croacia), el 8 de diciembre de 1964.

Jerkan era un jugador de 1´88 cm de estatura, una torre defensiva capaz de actuar incluso por el medio del campo. Pero sus mejores cualidades las lucía jugando en el centro de la zaga, donde el croata era un jugador importante por sus contundentes despejes, su gran estrategia defensiva y la elegante salida del balón con la que solucionaba cualquier ataque en contra.
Es por ello que Nikola acabaría siendo internacional por el equipo nacional de Croacia, por sus condiciones físicas y porque sabía entender el fútbol. Por si fuera poco, el zaguero croata también jugó en la liga inglesa con el Nottingham Forest.

A comienzos de los ochenta se inició en el fútbol jugando para el NK Zagreb. Debutó en la liga yugoslava en 1981 y siguió jugando en la capital croata hasta 1983 habiendo participado en diecinueve partidos del campeonato nacional.

Después fichó por el Dinamo Vinkovci, donde pasaría tres temporadas jugando un buen número de partidos antes de ingresar en las filas del Hajduk Split, uno de los clubes más destacados de la liga yugoslava.
En la escuadra dálmata estuvo durante cuatro años en los que confirmó su mejor momento de forma antes de que se paralizasen las competiciones en Yugoslavia a causa de la inestabilidad política. Con el Hajduk participó en 64 partidos en los que marcó un gol antes de abandonar un país con los días contados.

Entonces Jerkan llegó a España para recalar en el Real Oviedo con la Copa yugoslava bajo el brazo. Desde que ingresó en el conjunto astur se perfiló como uno de los fijos en el once del equipo. Debutó el 2 de septiembre de 1990, en la Liga Española frente al Sevilla en el Carlos Tartiere, partido que acabó con empate a cero.

Hasta seis años pasó en España, siempre jugando para el Oviedo. En todo ese tiempo participó en más de doscientos partidos y marcó un gol, que por cierto, Nikola en sus casi veinte años de carrera deportiva, sólo marcó tres goles. Uno con el Hajduk Split, otro con el Oviedo y otro con su selección.
Abandonó territorio español para jugar en otra liga destacada como la inglesa. Fichó por el Nottingham Forest, donde estuvo casi tres años sin contar con muchas opciones, aunque también jugó cedido para el Rapid de Viena.

Durante su estancia en Austria tuvo buenas actuaciones y jugó veintiún partidos. Mientras Jerkan seguía jugando para la selección croata, estaba militando en las filas del Charleroi compitiendo en la liga belga. Durante el curso 1999\2000 jugó un total de 36 partidos y poco después anunció su retirada como futbolista a los 36 años de edad.

Hasta 31 partidos ha jugado Nikola Jerkan como miembro de la selección de Croacia. 

- Croacia se separó de Yugoslavia y jugadores como Nikola Jerkan encontrarían la gran oportunidad de estrenarse como internacionales. El zaguero, que nunca había representado a la selección yugoslava ni siquiera en sus filas inferiores, sería llamado en 1992 para afrontar sus primeros retos a nivel de selecciones.

Debutó con Croacia en un amistoso que acabó con derrota en Melbourne frente a Australia (0-1). Participó en 31 partidos internacionales con su nueva nación y compitió en la Eurocopa de 1996 junto a grandes futbolistas como Boban, Davor Suker, Jarni y Boksic, entre otros.

lunes, 13 de noviembre de 2017

De cerca: Ognjen Vranjes.



- Parece que fue ayer, pero ya hace casi un año que nació Fútbol Balcánico y éste será el jugador número 450 del inicio de la saga balompédica de Fame Celeste. Se llama Ognjen Vranjes y es uno de los futbolistas más destacados de los últimos años en la sufrida Bosnia & Herzegovina, naturalmente, miembro actual del equipo nacional en el que acumula su octavo año como internacional.
Para tener todavía 28 años, este zaguero ha vestido la camiseta de bastantes clubes. Ha jugado en Bosnia, Serbia, Moldavia, Rusia, Turquía, Grecia y en la mismísima Liga Española, en la que ha jugado hasta no hace mucho como miembro del Sporting de Gijón.

Nacido en la vieja ciudad bosnia de Banja Luka el 24 de octubre de 1989, este jugador internacional tiene un hermano llamado Stojan que también es un profesional del fútbol y que también defiende los intereses de la selección bosnia.

En su ciudad natal empezó a jugar al fútbol. Allí se descubrió el talento de este jugador de retaguardia capaz de actuar como central o como lateral por el carril derecho. Tiene mejores condiciones para jugar como defensa en el centro de la zaga, y es por ello que durante la mayor parte de su carrera ha jugado en esa posición.
Es muy duro, como un bloque de hierro, y muy rápido a la hora de actuar ante los delanteros más habilidosos. Contundente atrás y con un físico asombroso, Vranjes es todo un seguro para sus compañeros y un buen aliado para los centrocampistas, pues sabe sacar el balón.

Con el Borac dio sus primeros pasos como futbolista. Llegó a esta disciplina en los inicios del nuevo milenio y participó para las diferentes secciones juveniles hasta 2006, momento en el que conseguiría ascender al primer equipo.

Vranjes debutó en la máxima categoría bosnia y durante dos temporadas sorprendió por su madurez. Tuvo más de cuarenta actuaciones con el Borac y anotó su primer gol como profesional antes de probar suerte en el país vecino.
En Serbia estuvo jugando para el Estrella Roja. Por desgracia no gozó de muchas oportunidades con el conjunto de Belgrado, ya que durante sus dos años vinculado al club estuvo jugando cedido en el Napredak Kruševac y posteriormente en Moldavia como miembro del Sheriff Tiraspol.

Ognjen ya había tenido sus primeras apariciones internacionales con Bosnia y gozaba de un cartel de prestigio que le permitió fichar por un grande de la liga rusa, el Krasnodar. Allí estuvo dos campañas jugando bastantes partidos y formando como titular en la mayoría de sus aportaciones. Eso le abriría las puertas de otros clubes europeos.

Siguió en Rusia, aunque no tuvo suerte jugando en el Alania Vladikavkaz. En mayo de 2013, sufrió una rotura del ligamento cruzado anterior , que lo mantuvo fuera del campo durante casi 8 meses. Después tuvo un breve paso por el fútbol turco jugando para el Elazığspor, y más tarde lo hizo en el Gaziantepspor.
En 2016 se produce su llegada a España para fichar por el Sporting de Gijón en el mercado de invierno de 2016. Debutó en la Liga Española y trató de colaborar en la lucha por la permanencia del conjunto asturiano, pero no pudo ser.

Abandonó España rescindiendo su contrato y habiendo participado en once partidos de liga para recalar en las filas del Tom Tomsk, en el que sería su retorno a la liga rusa. Actualmente se halla en Grecia jugando para el AEK Atenas.

Safet Susic convocó a Vranjes para empezar a jugar en la fase clasificatoria de la Euro 2012.

- Con la selección de Bosnia & Herzegovina ya lleva 33 apariciones internacionales. Primero jugó para la sección Sub-21, con la que hizo dos goles en diez partidos, y poco después recibiría la llamada del técnico Safet Sušic para entrar a formar parte del equipo de mayores.

El seleccionador decidió incluirle en el equipo para los partidos ante Luxemburgo y Francia, correspondientes a la fase clasificatoria de cara a la Eurocopa 2012. Finalmente tuvo que aguardar hasta el 17 de noviembre de 2010 para debutar en un amistoso ante Eslovaquia. Actualmente, Vranjes es un fijo en las convocatorias de la escuadra bosnia y participó en el Mundial de Brasil 2014.

domingo, 12 de noviembre de 2017

¿Te acuerdas de Ante Zanetic?



- Su nombre sonó con fuerza no hace mucho cuando se creyó que su compatriota -actual jugador del Real Madrid- Luka Modric había sido el primer jugador croata en ser incluido en el equipo ideal de la FIFA. Los medios, mostrando mediante documentos históricos, negaron tal afirmación, ya que el primer futbolista de origen croata en aparecer en el equipo ideal del mundo se llamaba Ante Zanetic (Žanetić), allá por 1960.

En aquel equipo histórico, aparte de Zanetic, se hallaban los siguientes: Gyula Grosics, Orvar Bergmark, Nilton Dos Santos, José Santamaría, Martin Verges, Ferenc Puskas, Alfredo Di Stéfano, Julinho, Paco Gento y, como no, Edson​ Arantes do Nascimento "Pelé".

Y así fue. En aquel once plagado de figuras de los años sesenta aparecía nuestro siguiente protagonista. Un hombre que llegó a jugar para la selección croata cuando su independencia era una quimera, y que posteriormente representó a la antigua Yugoslavia, con la que llegó a disputar una quincena de partidos.
No fue una leyenda al estilo de Vladimir Beara, Predrag Mijatovic o Rajko Mitic, pero Ante formó parte de un once histórico, cuando jugaba para el Hajduk Split, del que posteriormente pasaría a jugar en la liga belga.

Ante Zanetic nació el 18 de noviembre de 1936 en Blato (Korčula), en una Croacia que otrora pertenecía al desintegrado país de Yugoslavia. En su poblado natal acabaría destacando como futbolista para acabar entrando en las filas del NK BŠK Zmaj Blato.

Éste era un mediocampista de banda o central, de aquellos futbolistas de antaño a los que no se les caían los anillos por bajar a defender y subir la banda de la misma. Era esa mentalidad competitiva de atacar, atacar y atacar, aunque sin descuidar demasiado la defensa.
Zanetic triunfó por ser un futbolista de mucho sacrificio, técnico y muy vertical. En el club de su pueblo natal demostró ser una gran potencia del fútbol yugoslavo que debutó en la máxima competición tras siete años de completa formación juvenil.

En 1953 se incorporó al  GOŠK Dubrovnik, un equipo que por entonces se hallaba en la segunda división yugoslava. Ante soñaba con competir contra clubes más poderosos, de la orden del Estrella Roja, Partizan o Dinamo de Zagreb.

Sin embargo tuvo que conformarse con el fútbol de plata. Después de destacar en el conjunto de Dubrovnik le llegaría el gran momento de ascender a un equipo de élite como el Hajduk Split, en el que permanecería siete temporadas.
Con la escuadra dálmata vivió sus mejores momentos como futbolista. Sobre todo a finales de los cincuenta, Zanetic tuvo un papel muy importante dentro del equipo croata, con el que destacó en la liga estatal y en competiciones europeas. Sus acciones con el Hajduk le servirían de puente para empezar a jugar con la selección yugoslava.

Pero llegaría el momento de abandonar la disciplina de Split. Se decidió a abandonar Yugoslavia para jugar en el oeste de Europa en sus nueva experiencia en la liga belga. Ante jugó para el Club Brugge, y posteriormente en el Racing White (RWD Molenbeek). Tuvo un paso discreto por la liga belga hasta que se retiró en 1966. Ante Zanetic falleció el 18 de diciembre de 2014, recibiendo numerosos homenajes y siendo recordado como uno de los mejores jugadores croatas de los sesenta.

Ante Zanetic jugó para la selección croata antes de representar a Yugoslavia. 

- Gracias a sus maravillosos años en el Hajduk Split, Zanetic consiguió entrar en la selección de Yugoslavia tras haber jugado para el combinado de S.R. Croacia en un amistoso frente a Indonesia allá por el año 1956.

Ante participó en quince partidos con el equipo de Yugoslavia entre 1960 y 1961, llegando a marcar dos goles. Participó en la Copa de Naciones Europeas de 1960 y en el equipo yugoslavo que ganó los Juegos Olímpicos en Italia. En lo que nunca llegó a participar es en un Mundial de fútbol o en una Eurocopa.

De cerca: Besar Musolli.



- Desde que la FIFA aprobó la oficialidad de la selección nacional kosovar, cada vez son más los jugadores que nos vamos encontrando en las citas internacionales de esta nueva selección balcánica. Besar Musolli es uno de esos casos, un jugador que no hace mucho tuvo la oportunidad de representar a su país natal en un partido oficial.
Ese es el primer paso de un jugador que ya pudo representar a la selección de Albania, ya que, al igual que muchos otros kosovares, este centrocampista tiene también la nacionalidad albanesa. Finalmente se decantó por Kosovo.

Actualmente juega en la Superliga albanesa como miembro del Kukësi. Allí llegó tras destacar en su carrera juvenil hasta debutar profesionalmente con el KF Hysi, un equipo modesto de la liga kosovar en el que tuvo sus primeros pasos como futbolista de alto nivel.

Siempre se le ha visto jugando por el centro del campo, como jugador de banda izquierda o como mediocentro. En banda suele jugar como interior o extremo, y como pivote suele actuar más bien en la contención, pues es un futbolista que sabe retener la bola, recuperar balones y distribuir juego. También puede jugar algo más adelantado.
En banda saca a relucir otras características que sabe explotar a la perfección: velocidad, equilibrio, pases,... Quizás le falle un poco su hambre de cara al gol, pues en ese aspecto no es muy eficaz. La entrega y la disciplina son otras virtudes de este mediocampista.

Besar nació en la capital kosovar de Prishtina (Podujevo), el 28 de febrero de 1989. Eran tiempos en los que se aguardaba un cambio en el extinto estado yugoslavo, algo que se alargaría con la guerra independentista de Kosovo a finales de los noventa.

Como muchos kosovares, Musolli fue un niño que tuvo que soportar las terribles consecuencias de las guerras yugoslavas. No obstante, siguió practicando su deporte favorito jugando en diferentes equipos de barrio hasta entrar a formar parte de clubes profesionales.
A comienzos del nuevo milenio ya sorprendía jugando al fútbol, lo que en 2005 le llevó a incorporarse a las filas del F.C. Prishtina. Allí dio sus primeros pasos para completar su desarrollo juvenil.

Durante cuatro años en la disciplina de Prishtina demostró grandes cualidades que le llevarían a dar el salto profesional en 2009. Musolli ya estaba preparado para firmar sus primer contrato profesional, así que posteriormente se incorporó KF Hysi.

El de Podujevo solamente tenía dieciséis años cuando empezaría a conocer la alta competición en su Kosovo natal. En el club de su distrito natal supo tener paciencia para acabar formando parte del once inicial. Contó con varias oportunidades hasta que en su segundo año obtuvo la regularidad en el equipo titular.
En el Hysi estuvo tres temporadas en las que jugó un total de 66 partidos en los que hizo sus primeros goles como profesional, concretamente cinco. Abandonó su ciudad para cruzar la frontera y jugar en el país vecino.

Llegó a la liga albanesa para jugar en el Kukësi, entidad a la que se incorporó el 1 de julio de 2012. Desde entonces sigue jugando para este destacado equipo de Albania con el que consiguió ganarse la internacionalidad con el equipo nacional de Kosovo. Además ganó la Superliga albanesa durante el pasado curso 2016\17.

Partido ante Ucrania en el que Besar Musolli se estrenó como internacional con Kosovo.

- Sus exitosas apariciones con el campeón albanés le abrirían muchas puertas para acabar siendo jugador internacional. El 5 de junio de 2017, Musolli recibió la llamada del seleccionador de Kosovo para participar en sus primeras citas internacionales con la selección absoluta.

Era para competir en las fases clasificatorias de cara al Mundial de Rusia 2018. Besar no jugaría en su primera convocatoria frente a Turquía, aunque sí lo haría contra Ucrania, el 6 de octubre de 2017. Musolli fue titular en aquel encuentro que finalizó con 0-2 para los ucranianos. De momento es su única aparición con el combinado kosovar.

sábado, 11 de noviembre de 2017

¿Te acuerdas de Vladan Grujic?



- Ha jugado para innumerables clubes de fútbol en diferentes países como Rusia, Bulgaria, Alemania, Serbia, Chipre y Noruega. Desde que despuntó en su Bosnia natal y en el territorio vecino de Serbia, este mediocampista de básicas funciones ha estado en clubes como el Estrella Roja, F.C. Köln y el Litex Lovech, entre otros.
Destacar en el fútbol extranjero le valió para empezar a jugar con la selección de Bosnia & Herzegovina, a la que llegó en 2003 tras jugar en el equipo Sub-21, donde empezaría su experiencia internacional.

Él es Vladan Grujić (Владан Грујић), que nació en la ciudad bosnia de Banja Luka el 17 de mayo de 1981. En su ciudad natal comenzaría su carrera deportiva antes de empezar a jugar para varios equipos balcánicos en los que se labraría una gran fama.

Vladan jugaba como centrocampista, tanto ofensivo como defensivo. Sobre todo jugaba mejor en la última posición, ya que era un gran jugador de contención y mejor organizador de juego. Sin ser especialmente muy técnico, este hombre cubría las pocas carencias que tenía con su brega, disciplina y sencilla manera de jugar.
Como volante tenía gol, pero durante su estancia en otros clubes fue cuando se descubrió en él un gran mediocentro defensivo que perdía pocos balones y daba mucho juego a sus compañeros. Dar pases medidos y retener el balón eran básicas funciones con las que el bosnio daba mayor rendimiento.

Empezó jugando a finales de los noventa en el Borac Banja Luka de su amada ciudad natal. Allí estuvo tres temporadas en las que se ganó la confianza del entrenador desde el segundo año. Con este equipo tuvo 45 apariciones y marcó 23 goles jugando como mediapunta.

Pasó por el Obilic serbio antes de abandonar la escuadra de Banja Luka en 2001. Después pasaría a formar parte del Estrella Roja de Belgrado, con el que solamente tuvo tres oportunidades de jugar en la Superliga serbia.
En 2003 tuvo un breve retorno al Borac, marcó once goles a lo largo del curso 2003\04 y posteriormente fichó por el F.C. Köln alemán, con el que tuvo doce apariciones sin poder estrenarse como goleador en la Bundesliga.

Abandonó Alemania en 2005 para probar suerte en la Premier rusa, competición en la que jugó para el Alania Vladikavkaz durante media campaña. De ahí se marcharía a Bulgaria para jugar otro medio año en el Litex Lovech, con el que mantendría su mejor versión mientras agotaba sus posibilidades como jugador internacional con Bosnia.

La inestabilidad en su trayectoria a nivel de clubes le perjudicó en ese papel internacional. Grujic siguió jugando para clubes en los que no acabaría de cumplir más de un año en cada uno. Tras jugar para el FK Sarajevo probó suerte en la liga noruega con el Moss FK, equipo en el que tuvo grandes actuaciones sobre el césped.
Después de jugar en tierras nórdicas se fue una vez más a Bosnia y estuvo en el Laktasi, del que se marcharía a mitad del curso 2010\11 para irse al AEP Paphos de la liga chipriota, interrumpiendo su etapa en este club para jugar en el Limassol.

Grujic se marchó de Chipre para acabar con su carrera en tierras balcánicas. Jugó dos años más para el Borac de Banja Luka y en 2016 colgó las botas tras jugar durante una campaña para el Voždovac en la liga serbia.

La internacionalidad de Vladan Grujic se vio afectada por su inestabilidad a nivel de clubes.

- Sus pasos por equipos como el Borac, Köln y el Alania favorecieron al mediocampista balcánico a la hora de poder representar al equipo absoluto de Bosnia & Herzegovina tras haber estado representando al equipo Sub-21.

Con el equipo de mayores tuvo 24 apariciones en las que nunca pudo marcar un gol. Debutó con la selección bosnia un 16 de octubre de 2002, en un partido frente a la selección de Noruega que terminó con 2-0 para los nórdicos. A partir de 2006, Vladan Grujic no volvería a jugar con el equipo nacional, su inestabilidad a nivel de clubes le perjudicó totalmente.

De cerca: Jure Matjasic.



- Hay jugadores que cumplen sus sueños y salen motivados para seguir quemando etapas que les sirva para triunfar en un mundo tan complicado como es el fútbol. Este joven centrocampista halló su suerte recientemente cuando fue convocado por el seleccionador Srecko Katanec para intervenir en dos partidos amistosos, aunque finalmente solo fue en uno y no volvería a gozar de más oportunidades con la selección de Eslovenia.

Nacido el 31 de mayo de 1992 en la ciudad eslovena de Maribor, Jure Matjasic (Matjašič) aún no salió de su país natal para jugar al fútbol. De momento ha vestido las camisetas del Zavrč, Drava Ptuj y NK Domžale, para el que juega actualmente.

Este centrocampista zurdo suele actuar mucho por banda, sobre todo por la izquierda. Actúa como interior o extremo, y nunca tiene problemas para jugar a pierna cambiada. Pero otra posición que puede cubrir este talentoso y técnico futbolista es la de volante, aunque en su etapa profesional no ha llegado a jugar en ese puesto.
Fue en su etapa juvenil cuando el mediocampista tuvo más dinamismo y fue probado en diferentes zonas del campo, hasta que posteriormente empezó a jugar en la Prva SNL, en la que ya actuaría con su eterno rol de carrilero.

Y es que su velocidad y desborde es muy necesario para que el ataque de un equipo funcione con éxito. Matjasic empezó así a despuntar en las divisiones inferiores del Drava Ptuj, club con el que desarrolló toda su formación juvenil hasta 2011 figurando como una de las mayores perlas salidas del fútbol esloveno.

Debutó en la liga eslovena con el primer equipo del Drava Ptuj durante la temporada 2010\11. Sin embargo no fue tan fácil ganarse la titularidad para el talento esloveno, que comenzaría a tener esporádicas apariciones a lo largo de la campaña, aunque dejando claras muestras de esa calidad que le avalaba desde que era un chaval.
Fueron sus primeros pasos por la competición eslovena, teniendo catorce apariciones ligueras en las que anotaría su primer gol como profesional. El curso llegó a su fin y Jure tuvo que buscarse un equipo en el que tener más minutos.

Entonces encontró una buena oportunidad en el DNŠ Zavrč, equipo perteneciente a la categoría de plata eslovena y en el que Matjasic encontraría hueco de forma temprana. El de Maribor tuvo cinco temporadas sensacionales en las que se ganó el derecho a representar al equipo nacional.

Durante su estancia en el conjunto de Zavrč, el ya internacional esloveno había jugado un total de 134 partidos en los que había anotado dieciséis goles. Se hallaba en su etapa más dulce y pronto aparecerían clubes dispuestos a hacerse con sus derechos federativos.
El NK Domžale apostó fuerte por Jure, que a partir de 2016 defendería los colores de uno de los clubes más fuertes de Eslovenia. Al joven mediocampista no le sentó mal en cambio de aires, ya que empezó a tener una nueva oportunidad en el fútbol de alto nivel del país alpino demostrando que no había llegado a la internacionalidad por casualidad.

Con el Domžale vive ya su segunda temporada y aún sueña con ganarse un puesto fijo en las convocatorias de la selección nacional, con la que ya había debutado recientemente para alzar un poquito más su moral. Quizás su próximo reto sea jugar en el extranjero.

Matjasic, agachado en el centro de la imagen, en el día de su debut con la selección eslovena.

- No fue fácil abrirse un hueco en la selección nacional, y más difícil aún va a ser mantenerlo. Jure Matjasic solamente ha tenido una oportunidad para representar a Eslovenia sobre el verde, algo que le causó una gran satisfacción pese a saber que no será fácil mantener la internacionalidad. Con el equipo reserva ha participado en dos partidos más.

Su estreno fue en un partido frente a la selección de Turquía, cuando Katanec seleccionó a varios futbolistas para afrontar dos amistosos. El medio de Maribor se estrenó en aquel amigable celebrado el 5 de junio de 2016, en el que los otomanos se impusieron por 0-1.

¿Te acuerdas de Goran Maznov?



- Es más delantero que otra cosa, pero este hombre era capaz de jugar en cualquier posición de ataque con tal de crear peligro. Eso lo demostró en todos los clubes por los que pasó, bien sea en la liga belga con el Lokeren, en Turquía con el Diyarbakirspor o en su propio país, llegando a destacar para iniciar sus andanzas por el fútbol extranjero.
Como internacional, aún figura como uno de los mejores goleadores en la historia de la selección de Macedonia, ya que se halla en el cuarto puesto con diez tantos anotados. Jugadores como Goran Pandev o Hristov le superaron.

Goran Maznov (Горан Мазнов, en cirílico macedonio) nació el 22 de abril de 1981 en Strumica (República de Macedonia. En la capital macedonia de Skopje iniciaría su carrera deportiva a mediados de los noventa.

Tenía un físico ideal para jugar en punta, aunque cierto es que en una película de fútbol escuche una frase que me dejó marcado: "El fútbol es el deporte más demócrata que conozco, no hace falta ser el más fuerte o el más grande, solo hay que tener habilidad".
Goran es la contradicción al autor de esa frase, ya que posee la fuerza, la potencia, la estatura y la habilidad. Era un gran "cazagoles" que también sabía menearse por banda, principalmente por la derecha, pues era diestro. Rusia, Grecia, Bélgica, Turquía... por todos esos países supo demostrar que era un gran delantero.

Como ya he dicho, la carrera de Maznov empieza en la capital de Skopje. A finales de los noventa ingresó en las filas del Sloga Jugomagnat, donde estuvo dos temporadas conociendo el fútbol en su nivel profesional.

El Sloga vio sus primeros goles como profesional, concretamente cuatro. En 2001 quiso dar el paso de jugar en Rusia, por lo que se incorporó al Spartak de Moscú. Firmó un contrato de tres temporadas pero no jugaría más que dos partidos de liga, así que desde la entidad moscovita decidieron cederlo a otros clubes donde tener minutos.
De esta manera, el ariete balcánico pasó por equipos como el Torpedo de Moscú o el Baltika Kaliningrado, con los que tuvo más oportunidades. Con los últimos pudo participar en 56 encuenros, en los que convirtió once tantos.

Abandonó tierras rusas en 2005 para retornar a la liga macedonia. En ella volvería a jugar con el Rabotnički Skopje. En este equipo solamente jugó media temporada, pues visto su gran rendimiento le llegaría una buena oferta desde Turquía.

Maznov ficharía por el Diyarbakırspor, escuadra para la que jugaría durante el curso 2005\06 dedicando siete tantos a la afición del Diyarbakır Atatürk. Visto su éxito en la liga turca, al año siguiente quiso probar suerte en Bélgica, por lo que se incorporaría al Lokeren.
En la Jupiler League jugaría un total de 23 partidos en los que sumaría cuatro tantos antes de volver a Rusia para jugar en el Tom Tomsk. Después de tres buenas temporadas en las que hizo 21 goles, el atacante macedonio viajó a Grecia para fichar por el Kerkyra, con el que tendría una estancia algo discreta a nivel competitivo.

Volvió a Macedonia en 2012 y jugó para el Metalurg Skopje, de donde al año siguiente pasaría al Shkëndija. Maznov no volvería a jugar fuera de su país, ya que tras jugar en el Shkupi, pasaría a formar parte del F.K. Belasica, club con el que afronta los años finales de su carrera deportiva tras una ajetreada carrera jugando en cuatro países diferentes.

Goran Maznov celebra uno de los diez tantos obtenidos con la selección de ARY Macedonia.

- Pandev, Hristov y Sakiri son los goleadores que a día de hoy le superan en la tabla histórica de la selección de Macedonia. Goran Maznov se quedó en diez goles, de los 43 partidos que participó como jugador internacional.

El 24 de julio de 2001 tuvo su primera cita competitiva con el combinado balcánico. Maznov jugó en un partido amistoso ante la selección de Qatar, el cual finalizó con derrota por 1-0 en el estadio francés de Évreux. A partir de 2009, el delantero de Strumica dejaría de actuar con la selección macedonia.

jueves, 9 de noviembre de 2017

De cerca: Domagoj Vida.



- Este es uno de los defensas balcánicos que más me han gustado en los últimos tiempos. Puede desempeñar cualquier papel en la zaga y así ha ido quemando etapas en distintos equipos como el Bayer Leverkusen, el Dinamo de Zagreb o el Dynamo de Kiev. Lo extraño es que todavía no haya pisado otras ligas a la altura de la Bundesliga.
Con la selección croata ya tiene una dilatada experiencia. Además de participar en la Copa del Mundo de Brasil 2014, este sensacional defensor ya ha participado en más de cincuenta partidos internacionales.

Domagoj Vida nació en Našice (Croacia), el 29 de abril de 1989. Pese a las dificultades que trajo la guerra de la independencia, este chico fue creciendo en su pueblo natal hasta llegar a dedicarse por completo a su deporte favorito, el fútbol.

Puede jugar en cualquier lado de la defensa, ya que domina bien el balón con las dos piernas, así que puede actuar por ambas bandas pese a ser diestro. Lo normal es verle de central, pues es un jugador corpulento, con mucha fuerza y resistencia. Los delanteros no lo tienen fácil cuando es Domagoj Vida el que está enfrente.
Últimamente ha demostrado que tiene gol. Pocos defensas son tan completos como él. Es rocoso, contundente, técnico y duro... muy duro. Pocos defensas europeos tienen la garra de este croata que ya lleva tiempo destacando con su selección.

En 1996 entró a formar parte del Jedinstvo Donji Miholjac, donde estuvo desde los siete años hasta que en 2003 decidió mudarse a Osijek para completar su formación deportiva en el equipo de su ciudad.

Con el N.K. Osijek debutaría en la Prva HNL en 2006. Pronto sorprendió a muchos con su buen juego y versatilidad, haciéndose con la titularidad en el segundo año de los cuatro que pasó en la disciplina de Gradski vrt.
Habiendo llegado casi a los cien partidos en la competición máxima de Croacia, Vida quiso probar suerte en una de las ligas más poderosas del viejo continente, así que en 2010 puso rumbo a Alemania para confirmar su fichaje por el Bayer Leverkusen.

Su carrera estaba en pleno auge. Domagoj consiguió debutar con el equipo absoluto de la selección arlequinada y solo era cuestión de seguir en la misma línea. Sin embargo no tuvo mucha suerte en la Bundesliga, ya que no tendría más que una oportunidad para demostrar su valía. De hecho, tuvo una mayor participación en los partidos de la Europa League.

Tras su fracaso en tierras germanas regresó a su tierra natal para incorporarse al Dinamo de Zagreb en el mes de junio de 2011. Vida necesitaría dos temporadas para recuperar su mejor versión, esa que apenas le dejaron mostrar en la Bundesliga.
Con el conjunto de Zagreb participó en un total de 44 partidos y convirtió seis goles, crecimiento favorable que le serviría para mantener su papel internacional y así asistir al Mundial de Brasil con el equipo nacional.

Después de dos buenos años en la Prva HNL, el internacional croata se incorporó en 2013 al Dynamo de Kiev, destacado conjunto ucraniano con el que rápidamente se ganaría la titularidad. De momento ya acumula su quinta temporada en el Dynamo.

En 2014, Domagoj Vida acudió al Mundial de Brasil 2014 con el combinado ajedrezado. 

- Pasó por todas las secciones menores de la selección croata hasta que comenzó a destacar sobradamente con el equipo Sub-21. En 2010 fue llamado para formar parte de la selección absoluta, con la que ya acumula 53 partidos y dos goles, uno de ellos en un reciente partido de clasificación de cara al Mundial de Rusia, frente a Kosovo.

Debutó en un amistoso celebrado en Osijek, el 23 de mayo de 2010. Fue en un partido contra Gales que acabó con 2-0 para los croatas. Vida consiguió participar en el Mundial de Brasil 2014, ahora habrá que ver lo que ocurre en el de Rusia, que está a la vuelta de la esquina.

miércoles, 8 de noviembre de 2017

¿Te acuerdas de Vladimir Vujovic?



- Nada tiene que ver con aquellos hermanos gemelos Vujovic que marcaron los últimos pasos de la magnífica selección yugoslava. Su apellido es una simple coincidencia, como el que se apellida Jones en Inglaterra o López en España. Lo que sí le une a ellos es la pasión por el fútbol y haber llegado a ser internacional, aunque en este caso fue representando a la "Crna Gora".
Tampoco es que haya sido muy dilatada su experiencia con la selección montenegrina, ya que ni siquiera pasó por las secciones menores y su participación con el equipo absoluto se resume en cuatro paridos.

Lo que sí me parece curioso es su alma aventurera, ya que este mediocampista o defensor ha jugado en países como Kazajistán, Indonesia, Líbano, China y en los Emiratos Árabes Unidos. También se atrevió con la liga rusa y la húngara.

Vladimir Vujovic (владимир вујовиц) nació en la ciudad montenegrina de Budva el 23 de julio de 1982. Se trata de un jugador de gran altura, de casi un metro noventa, ideal para defender en el eje de la zaga o jugar como mediocentro defensivo. Ésta última es la posición en la que más veces ha jugado y la que le llevó a destacar como futbolista.
Defendiendo es muy duro, a veces hasta agresivo. Es un jugador que para dedicar más tiempo a defender tiene bastante gol, y es de los que saben tocar el balón para darle un sentido al sacrificado oficio del defensor.

Todavía estaba inestable la zona balcánica cuando Vujovic daba sus primeras patadas al balón. Ya desde joven entraría a formar parte del FK Mogren, un destacado club de Budva en el que daría el salto profesional a finales de los noventa.

Vlado jugaría en varios clubes serbomontenegrinos antes de cargar el petate y lanzarse a la aventura. Del Mogren pasó al FK Beograd, y de ahí al Petrovac. En 2003 se marchó al Sutjeska Nikšić, con el que sí tendría un papel bastante protagonista al participar en 35 encuentros de liga.
Estuvo jugando en la liga macedonia para el Pobeda Prilep, con el que destacaría de tal manera que conseguiría asistir a sus primeros partidos internacionales con Montenegro. A partir de entonces la vida de Vujovic sería como la de Willy Fog, siempre viajando.

Su primer destino fue Ucrania, donde estuvo jugando para el Tavriya Simferopol, de donde viajaría posteriormente a los Emiratos Árabes Unidos para fichar por el Al-Wahda. Allí tuvo bastante éxito, aunque su estancia no pasaría de un año pues, una vez finalizado el curso, ya estaba haciendo las maletas otra vez.

Tuvo un breve retorno al Mogren de Budva antes de seguir explorando Europa. Tras media temporada en el club de su ciudad, Vujovic se marchó a la liga rusa, donde jugó el resto del curso para el Luch-Energiya.
Al año siguiente se fue en Hungría y se incorporó al Vasas Budapest sin llegar a estabilizarse en el club magiar. Volvió a hacer escala en el Mogren antes de embarcarse en otra aventura exótica. Esta vez tocaba jugar en Kazajistán, para el Vostok Oskemen. Después de otra media campaña decidió marcharse a Líbano y probar suerte en el Al Ahed de Beirut.

La carrera de Vujovic ya parecía más un largo viaje en crucero que la carrera de un deportista. En 2012 voló a China para formar parte del Shenyang Zhongze, de donde retornó a Montenegro para jugar nuevamente para el Petrovac y así pegarse otro largo viaje a Indonesia. En este país acabaría su largo periplo futbolístico tras jugar en el Persib Bandung, donde fue todo un ídolo antes de retirarse oficialmente en 2014.

La carrera de Vlado Vujovic fue un tanto ajetreada, ya que llegó a jugar en diez países diferentes. 

- Y como le gustaba tanto viajar, a Vujovic le salió la posibilidad de jugar con la selección de Montenegro tras la llamada del seleccionador y gran figura internacional de la extinta selección yugoslava Zoran Filipovic.

El 24 de marzo de 2007 tuvo su anhelado debut con la selección de Montenegro en un partido amistoso ante Hungría en el que su equipo ganó por 2-1. Después tendría tres oportunidades más de defender la bandera de la Crna Gora, pero quizás sus continuos viajes le perjudicaron a la hora de seguir contando para los demás seleccionadores.

De cerca: Aleksandar Ignjovski.



- Completo futbolista que ya milita en una de las ligas más importantes de Europa, la Bundesliga. Empezó cedido en el 1860 München, de donde posteriormente pasaría a jugar en otros clubes más destacados como el Werder Bremen o el Eintracht Frankfurt. En los últimos años se le ha visto relacionado con varios clubes, pero actualmente juega para el Friburgo.
Desarrolló una completa formación en las categorías menores de la selección serbia a partir de 2009 para después empezar a jugar en el equipo absoluto, en el que comienza a tener bastantes convocatorias desde su debut.

Aleksandar Ignjovski (Александар Игњовски) tiene raíces macedonias pero nació en Pančevo, Vojvodina (Serbia), el 27 de enero de 1991. Empezó a jugar en equipos modestos de Belgrado hasta que ingresó en las filas del OFK Beograd, con el que iniciaría una exitosa carrera que derivaría en la internacionalidad con el equipo nacional.

Futbolistas como éste son de mi devoción. Técnico, con visión de juego y un manejo del esférico de auténtico genio. Aleksandar es uno de esos zagueros que bien puede jugar como centrocampista, incluso en ataque, ya que no le falta imaginación para crear jugadas de la nada, así, por arte de magia. En mi opinión es bastante completo.
Normalmente le veréis jugando en banda, tanto por la derecha como por la izquierda, aunque es diestro. Más de una vez ha jugado más adelantado, como mediocentro defensivo, interior o incluso extremo. Lo dicho, tiene unas condiciones de auténtico crack.

Sus primeros pasos los da en una Serbia castigada por la guerra. En la capital de Belgrado hizo sus pinitos como futbolista, llegando a entrar en uno de los clubes más legendarios de Serbia, el OFK de Belgrado, al que se incorporó en 1998.

Entre finales de los noventa y hasta 2008 tuvo una formación muy trabajada. Eso le llevó a ser reconocido como uno de los mejores serbios juveniles con la selección y a debutar en la Superliga serbia, que ya no contaba con clubes montenegrinos por entonces.
Con el OFK dio sus primeros pasos, pero el club belgradense prefirió foguear a la joven perla balcánica y para ello buscó clubes en los que jugar como cedido. Entonces apareció el 1860 München alemán.

Ignjovski jugó en la categoría de plata germana y destacó de manera brillante, lo que despertó el interés de otros clubes más importantes, como el Werder Bremen. Con éste conocería la Bundesliga y allí permanecería tres temporadas cumpliendo con un total de sesenta partidos en los que hizo un gol. Fueron buenos sus primeros pasos con el conjunto de Weserstadion.

Pese a su buena etapa en el Werder, Ignjovski no seguiría en el club, ya que el 3 de abril de 2014, se anunció que Ignjovski había firmado un contrato de tres años con Eintracht Frankfurt. El serbio estaría dos años en la escuadra de Hesse.
Con el Eintracht participó en 38 partidos más de la Bundesliga. Al final del curso sonaron muchos rumores que apuntaban a que Aleksandar acabaría cambiando de liga, pero finalmente aceptó jugar para el SC Freiburg.

Desde junio de 2016 lleva jugando para el Freiburg, con el que más o menos mantiene su línea participativa en la liga alemana. Aún es joven y tiene calidad de sobra para acabar jugando en clubes más poderosos, pero para ello necesitará tener más minutos internacionales para darse a conocer.

Pese a tener raíces macedonias, Aleksandar Ignjovski prefirió representar a la selección serbia.

- Desde 2009 empezó a jugar para las secciones menores de la selección de Serbia. Ignjovski es de origen macedonio, por lo que muchos pensaron que acabaría debutando oficialmente con la selección de ARY Macedonia. Mirsad Jonuz, declaró oficialmente su deseo de que jugara para Macedonia, pero finalmente el jugador se decantaría por Serbia.

Concluyó su etapa juvenil y se estrenó con el equipo de mayores el 28 de febrero de 2012 en Larnaca (Chipre), en un partido amistoso contra Armenia. Actualmente acumula doce internacionalidades y solo le falta ganarse la titularidad. Con el talento que tiene no debería costarle.

martes, 7 de noviembre de 2017

¿Te acuerdas de Milan Obradovic?



- Toca repasar el historial de uno de "los últimos yugoslavos", cuando la secesión yugoslava había reinventado a la extinta selección llamándose posteriormente República Federativa de Yugoslavia. Nuestro siguiente protagonista representó a aquella última escuadra balcánica, tanto en sus secciones menores como al primer equipo.
Milan Obradovic (Милан Обрадовић) pasó por varios países jugando al fútbol: Alemania, Rusia, Grecia y Ucrania. Su techo fue jugar en la Bundesliga alemana con el Borussia Mönchengladbach, donde solo estuvo una temporada.

Este rocoso defensor nació en la capital serbia de Belgrado, el 3 de agosto de 1977. Empezó desarrollando su carrera juvenil en el fútbol yugoslavo antes de que se paralizasen las competiciones y se formasen otras nuevas en cada país independiente.

Como defensa no tenía precio. Inteligente, duro, contundente, eficaz al corte y muy rápido. Quizás a veces pecase de ser demasiado duro, un tanto agresivo diría yo, por lo que sus acciones le costaron muy caras cuando el colegiado estaba atento a la jugada. Por lo demás, las condiciones de Milan eran las de un defensa seguro y con oficio.
Además de desempeñarse como defensa central, también podía moverse por banda ocupando el carril derecho para hacer de lateral. Es en esa posición donde aprovechaba su velocidad e ingenio para obstaculizar a los rivales.

En la capital belgradense desarrolló su carrera juvenil lo buenamente que pudo, ya que la guerra no dio tregua durante los años más difíciles de la secesión. Cuando más o menos se fue restableciendo el orden, Obradovic entró a formar parte del sistema juvenil del Radnički de Belgrado, con el que pronto debutaría en la máxima categoría serbia.

Debutó, se hizo profesional y jugó tan solo un partido con el conjunto capitalino, de donde posteriormente pasaría al Obilic. En este equipo estaría tres años y se ganaría el derecho de representar a la última Yugoslavia a nivel internacional.
Tras sus primeras buenas actuaciones en la liga serbia, Milan partiría a Rusia para comprometerse con el Lokomotiv de Moscú, donde estaría por dos temporadas jugando 31 partidos en las que anotó su primer gol como profesional.

Abandonó la capital rusa y se propuso un mayor reto al fichar por el Borussia Mönchengladbach, donde solamente estaría un año, suficiente para estrenarse en la Bundesliga, en la que tuvo ocho apariciones sin mayores opciones dentro de una plantilla muy competitiva.

En 2005 regresó al Radnički, aunque no permanecería mucho tiempo en su país al contar con una suculenta oferta llegada desde Grecia. Entonces el muro serbio ingresó en las filas del Akratitos, donde solamente estaría un año.
Sus mejores momentos los viviría en Ucrania jugando para el Metalist Járkov. En este club permanecería a lo largo de siete campañas cumpliendo con un buen número de apariciones, figurando siempre como uno de los fijos del once y mostrando su lado más goleador al hacer siete dianas en 147 partidos.

Su paso por el Metalist solo se vio interrumpido por una cesión al Arsenal de Kiev, donde acabó la campaña 2012\13 antes de retornar a Serbia y jugar para el Partizan de Belgrado. Obradovic acabó su carrera en 2014 jugando para el histórico OFK Beograd.

Milan Obradovic fue uno de los últimos representantes de la República Federal de Yugoslavia.

- No fue muy larga su experiencia internacional, en la que estuvo representando a la RF de Yugoslavia desde sus categorías inferiores. Jugó para la sección Sub-21 entre finales del siglo pasado y comienzos del nuevo. Tras sus seis apariciones con los jóvenes, Obradovic recibiría la llamada del seleccionador para debutar con el equipo absoluto.

El 26 de agosto de 2000 se estrenaría con la última Yugoslavia, con la que solamente tendría siete apariciones internacionales. Pese a su buen rendimiento en la liga ucraniana, Milan nunca volvería a jugar a nivel de selección, ni siquiera para Serbia cuando se separó de Montenegro.

lunes, 6 de noviembre de 2017

De cerca: Mario Vrancic.



- Al igual que muchos niños de su época, este jugador tuvo que criarse lejos de su país a causa de la cruel guerra de Yugoslavia que tan desolada dejó su querida Bosnia & Herzegovina. Pero aún así decidió representar a su país internacionalmente tras haber jugado para las secciones menores del equipo nacional alemán.
Y es que este buen centrocampista basó casi toda su carrera deportiva en tierras germanas. Jugó en varios clubes modestos hasta que en 2017 decidió marcharse a Inglaterra para jugar en el Norwich City, su club actual.

Mario Vrančić vino al mundo un el 23 de mayo de 1989 en la localidad croata de Slavonski Brod, la cual es limítrofe con Bosnia, países comunicados por el río Sava. Allí solamente pasaría unos años, hasta que la guerra irrumpió en la zona balcánica, lo que causó que muchas familias se refugiasen en otros países. La familia de Mario eligió Alemania.

Hermano menor de Damir, también futbolista, este centrocampista de perfil atacante y defensivo empezó a jugar al fútbol en Hanau-Kesselstadt. Allí dio sus primeros pasos balompédicos hasta destacar por encima de muchos jugadores de su edad.
A este mediocampista le sobra calidad. Es zurdo y puede jugar como interior o extremo, pero la posición en la que más se ha movido es en la de volante ofensivo. Tiene visión de juego, es rápido, ágil y tiene un potencial físico algo fuera de lo normal. Es de los que saben tocar la bola, un jugador muy técnico y con gol.

En 1996 ingresó en las filas del VfR Kesselstadt, equipo donde desarrolló su carrera juvenil durante ocho años. En 2004 entró a formar parte de la cantera del Mainz 05, del que pasaría a jugar en su segundo equipo durante casi cinco años.

Vrancic conseguiría debutar en la Bundesliga con el primer equipo, aunque solamente jugaría en nueve partidos de liga. Después estaría cedido en el Rot Weiss Ahlen, y a su regreso a la dinastía de del Opel Arena sería relegado al segundo equipo, donde solamente estaría jugando durante seis meses más.
Fue entonces cuando el bosnio ingresaría en la cantera del Borussia Dortmund. Sin opciones de jugar en el primer equipo, Mario estaría un año en el conjunto de menores sumando dieciséis goles en 47 partidos.

El 1 de julio de 2012 se unió a Paderborn 07, club con el que concursaría en la segunda división de la Bundesliga. Con este conjunto alcanzaría a la categoría máxima siendo uno de los mejores jugadores de la plantilla. En tres temporadas jugó casi cien partidos y convirtió doce tantos.

Su paso por el Paderborn fue decisivo a la hora de convertirse en internacional con la selección de Bosnia. Vrancic abandonaría la escuadra de Benteler para fichar por el Darmstadt 98, un recién ascendido a la Bundesliga donde permaneció dos temporadas jugando un total de 45 partidos en los que marcó seis goles.
En junio de 2017 se produciría un gran cambio en la vida del mediocampista balcánico, que abandonaría Alemania para jugar en la liga inglesa con el Norwich City. De esta manera, Mario debutó en la Premier el 5 de agosto contra Fulham.

En el conjunto inglés parece que le están saliendo las cosas a pedir de boca. Ya en su primer partido había hecho un doblete que le serviría para perfilarse como uno de los titulares del equipo mientras sigue sumando internacionalidades con la selección bosnia.

Después de jugar para las secciones menores alemanas, Vrancic empezó a jugar para Bosnia desde 2015.

- Mario Vrancic representó a Alemania en sus niveles juveniles teniendo un papel bastante importante en cada equipo. Ganó el Campeonato de Europa Sub-19 y continuó jugando en el siguiente nivel, hasta que en 2009 dejaría de jugar sin tener opciones con la selección absoluta.

El medio balcánico estuvo esperando a que la FIFA le diera luz verde para poder jugar con la selección de Bosnia, algo que conseguiría en 2015. El seleccionador Mehmed Baždarević le llamó para que el 6 de septiembre de 2015 debutase en un partido oficial frente a Andorra. Desde entonces ya ha intervenido en seis partidos internacionales.

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