De cerca: Milos Krkotic.

- Mediocampista de corte defensivo que cuenta con la experiencia de haber jugado internacionalmente con Montenegro y en cuya trayectoria deportiva ha defendido los intereses de clubes moldavos, serbios y montenegrinos.
Milos Krkotic (Miloš Krkotić o Милош Кркотић) nació en Titograd el 29 de septiembre de 1987, cuando aún existía la antigua Yugoslavia. De momento cuenta con dos títulos, una liga montenegrina y una Supercopa en Moldavia, y aún se espera más de un jugador que de momento no ha jugado en las ligas más fuertes de Europa.

El centro del campo es la zona en la que mejor se maneja, pero también es muy útil en banda ocupando el carril izquierdo. En alguna ocasión ha jugado como defensa central debido a su gran físico y a la buena salida del balón que ofrece, y desde luego que cumple con creces.

En una Montenegro aún sacudida por el conflicto de los Balcanes, un joven Krkotic descubrió en el fútbol su vía de entretenimiento, la que en un futuro le abriría la posibilidad de representar a su país a nivel deportivo. Tras jugar en varios equipos de su ciudad natal, Milos entró en las filas inferiores del Zeta de Golubovac, con el que concluiría su etapa formativa.
En 2006 entró a formar parte del primer equipo, aunque apenas tuvo minutos en el mismo año que el Zeta se haría con el campeonato de liga. A partir de entonces se estableció en la primera plantilla, pasando de contar con escasas opciones a convertirse en un titularísimo de la escuadra de Podgorica.

Krkotic estuvo cinco temporadas en el Zeta, jugando 71 partidos de liga en los que hizo tres goles. Enseguida se preguntaría por ese espigado centrocampista que en poco tiempo conseguiría ganarse una buena fama en su país, y una oferta llegaría desde Moldavia para incorporarse a las filas del Dacia Chişinău.

En la escuadra moldava coincidiría con su compatriota Janko Tumbasevic, que llegaron como refuerzos de verano para defender el título de liga del ejercicio anterior. El técnico Igor Dobrovolski hizo buen uso del medio montenegrino, que desde su llegada se establecería en la titularidad consiguiendo el título de la Supercopa moldava en 2011.
Sus actuaciones con el Dacia le llevaron a ser convocado por la selección de Montenegro y durante cuatro campañas sumó más de cien partidos en los que demostró tener gol. Krkotic marcó un total de 33 goles, fue su era más goleadora en su carrera deportiva.

Regresó al Zeta en 2016, aunque allí no permanecería mucho tiempo, puesto que otros clubes insistirían en la contratación del centrocampista de Titograd. Desde 2017 juega en la Superliga serbia como miembro del Metalac Gornji Milanovac.

Milos Krkotic durante un partido internacional con la selección de Montenegro.

- Sorprende ver que un jugador tan eficiente haya contado con tan pocas oportunidades para jugar con la selección de su país. Milos Krkotic fue convocado por vez primera en 2013, tras su exitosa etapa en la liga moldava que le llevaría a jugar sus primeros compromisos internacionales con Montenegro.

De momento su participación con la "Crna Gora" se ha quedado en cinco partidos, aunque aún no se puede descartar que Krkotic tenga más apariciones internacionales, ya que pocos mediocampistas cuentan con sus condiciones, además de que la veteranía que va adquiriendo es otro punto a favor.