- Vamos con otro de esos futbolistas que nunca pudieron divorciarse del fútbol, uno de aquellos míticos jugadores que nos despiertan la nostalgia para recordar unos tiempos muy diferentes a los actuales en los que el fútbol se estilaba más por entrega y profesionalidad.
Nuestra memoria se esforzará en recordar al bosnio Mehmed Bazdarevic (Baždarević), un mediocampista que llegó a defender a la extinta Yugoslavia para posteriormente jugar con la selección de Bosnia & Herzegovina.
Su fuerte era destruir y crear juego. Mehmed era capaz de moverse ofensiva y defensivamente para ganar la posesión de su equipo. A este mediocampista nacido en Višegrad (Bosnia), el 28 de septiembre de 1960, no le faltaba gol, y también era muy bueno a la hora de servir balones a sus compañeros.
Su carrera se inicia a finales de la década de los setenta, en las secciones inferiores del Željezničar. Con el equipo "ferroviario" debutó en la alta competición en 1978, y en él consiguió convertirse en una estrella de la liga yugoslava a medida que iba alcanzando la madurez.
Sus acciones con el Željezničar le llevaron a ser internacional con Yugoslavia, y eso hizo que muchos clubes se interesaran por él. Dejó la entidad de Sarajevo en 1987, tras toda una década defendiendo los intereses del club. Sus números en la liga balcánica fueron de 229 partidos y 22 goles.
Además de sus buenos registros, Mehmed formó parte de un equipo que logró llegar a las semifinales de la Copa de la UEFA en 1985 bajo la dirección de Ivica Osim. Entonces llegaron varias ofertas para Bazdarevic, que finalmente optó por marcharse a Francia para fichar por el Sochaux, donde también pasaría gran parte de su carrera.
El mediocampista bosnio debutó en la Ligue-1 y consiguió ganarse rápidamente la titularidad. En el Sochaux estuvo ocho campañas en las que anotó 20 goles y superó los trescientos partidos. Dado que la guerra no cesaba en los Balcanes, el centrocampista decidió seguir en tierras galas.
En 1996 firmó por el Nimes, club al que defendió durante una temporada completando 32 partidos de Liga. Ya con 38 años, Mehmed Bazdarevic era consciente de que su longeva carrera estaba llegando a su fin, así que dio una última oportunidad jugando para el modesto Étoile Carouge, con el que tuvo sus últimas apariciones como futbolista.
En Francia se había estabilizado y nada le motivaba para regresar a su país natal. Bazdarevic volvió a la ciudad de Montbéliard para colaborar con el cuerpo técnico del Sochaux antes de iniciar una carrera como técnico en solitario. Además de dirigir a varios clubes en su nueva experiencia, el técnico balcánico se encargó de entrenar al equipo nacional de Bosnia, aquel que también llego a representar como jugador en un pasado no muy lejano.
Después de jugar para la selección yugoslava, Bazdarevic pasó a representar a Bosnia. |
- Con Yugoslavia conquistó la medalla de bronce en los Juegos Olímpicos de Los Ángeles 1984. Su debut con el equipo nacional yugoslavo llegó en 1983, y a partir de entonces sumó un total de 54 partidos en los que marcó cuatro goles.
Llegó la desmembración balcánica y Bazdarevic pasó a representar a la selección de Bosnia & Herzegovina. Como ya se hallaba en edad veterana, Mehmed solo tuvo tiempo de jugar dos encuentros internacionales con su nuevo combinado nacional, quedando en el recuerdo el duelo entre bosnios y croatas que finalizó con 1-4 para el equipo arlequinado. Aquel 8 de octubre 1996, Bazdarevic jugó su último partido internacional.
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