¿Te acuerdas de Vladimir Jugovic?

- Su paso por España no estuvo a la altura de un jugador que era todo técnica y calidad. Creo que no hace falta buscar muchas palabras para definir el talento del centrocampista Vladimir Jugovic (Владимир Југовић). Cuando él jugaba el fútbol callaba. Su imaginación sobre el césped, la visión de juego, los pases, el manejo del balón y sus disparos a puerta ya explicaban claramente lo que la figura de Jugovic representaba el balompié.

Este magnífico volante nació en Milutovac (Serbia), el 30 de agosto de 1969. Quizás su carrera deportiva le libró de formar filas con el ejército de los chetniks, ya que Vladimir hizo el servicio militar obligatorio en la brigada paracaidista cuando la guerra aún no se había iniciado.
Su pasión por el fútbol y su admiración hacia el alemán Lothar Matthäus, le convirtió en todo un jugón que parecía emular a su ídolo en toda jugada aunque el estilo no era muy parecido.

Jugovic como jugador de la Sampdoria.

- Considerado como una de las mayores perlas salidas del fútbol serbio, Jugovic se fue formando en las categorías inferiores del Estrella Roja, equipo que por entonces pertenecía a la liga yugoslava. Entre 1989 y 1992 perteneció al histórico club belgradense y aún siendo muy joven triunfó al conquistar Copa de Europa de 1991, es decir, lo que hoy en día conocemos como la Champions League. También consigue hacerse con la Copa Intercontinental ante Colo Colo, destacando particularmente al anotar dos tantos. El resultado final sería de 3-0 favorable a los balcánicos.
Aquel era el momento cumbre de un yugoslavo que en cuestión de poco tiempo sería serbio. Tras una época dorada como jugador del Red Star, en 1992 fue traspasado a la Sampdoria italiana, un club con el que también brillaría con luz propia. Sven Goran Eriksson fue su gran valedor, aunque fuera el gran Vujadin Boskov quien más insistió en el fichaje del ya internacional centrocampista. En sus tres temporadas como jugador de la Samp no solamente consigue marcar dieciocho goles en la Serie A, además conquistó la Copa italiana en 1994. Jugovic se marchó de la entidad del Luigi Ferraris como un héroe, dejando atrás grandes lecciones de fútbol.

No se marcharía de Italia sin dejar más muestras de su clase. Entre 1995 y 1997 jugó para la Juventus, con la que ganó una liga y repitió los títulos de la Copa Intercontinental y la Liga de Campeones.
Posteriormente jugó para la Lazio. Allí permaneció durante el curso 97\98 y conquistó otra Copa de Italia. Además, casi logra ganar la Copa de la Uefa, pero no pudo ser, ya que el Inter de Milan se impuso en un choque con acento italiano. Al final del curso abandona Roma y aterriza en España tras fichar por el Atlético de Madrid.

Con el club colchonero solo disputa el curso 1998\99. Las lesiones le impidieron triunfar, aunque sí pudo mostrar su calidad, como hizo en un partido de la Copa de la Uefa en el que el serbio marcó un golazo de chilena. Hay que reconocer que el conjunto de Manzanares no atravesaba buenos momentos, como se pudo confirmar al año siguiente con su descenso a Segunda División... aunque el gran "Jugo" ya no estaba.

Volvió a Italia para jugar en el Internazionale milanés. Entre 2001 y 2003 probó suerte en la liga francesa jugando para el A.S. Monaco, de donde pasaría posteriormente al Admira Wacker austriaco, en el que estaría a lo largo del curso 2003\04.

Finalizó su carrera deportiva jugando para Rot Weiss Ahlen, en la liga alemana. Vladimir Jugovic abandonó la práctica del fútbol en 2005, con 36 años de edad. Después se convirtió en agente de futbolistas y de vez en cuando colabora con la televisión serbia haciendo de comentarista deportivo.

Vladimir Jugovic participó con la selección de Yugoslavia entre 1991 y 2002. 

- Evidentemente, un jugador de estas condiciones y con cierto historial tiene que tener carrera internacional. Vladimir Jugovic ha vestido la camiseta de la selección yugoslava en 41 ocasiones y ha marcado tres goles.

Con Yugoslavia jugó el Mundial de Francia 98 y la Eurocopa de 2000. Aquel combinado nacional que ya utilizaba el nombre de Serbia & Montenegro, no logró pasar de los octavos en la Copa del Mundo de 1998, mientras que en la Eurocopa de Bélgica-Holanda cayó en cuartos de final. Jugovic abandonó la selección en 2002 y no pudo participar en el Mundial 2002 al no lograrse la clasificación para este torneo celebrado en Corea y Japón.