De cerca: Mirko Ivanic.

- Este es el típico futbolista que muchos entrenadores querrían tener en su equipo. Es un volante con gran visión de juego que ha desarrollado gran parte de su carrera deportiva entre la provincia de Vojvodina y Novi Sad. También ha querido probar suerte en el extranjero, por ello actualmente se halla en las filas del Bate Borisov, de la Vysshaya League.
Inicialmente empezó jugando en las secciones menores de la selección de Serbia, pero buscando la oportunidad de mantener su internacionalidad, este centrocampista prefirió cumplir con su otra parte de raíces montenegrinas jugando para la "Crna Gora".

Pero Mirko Ivanic (Мирко Иванић) nació realmente en Serbia, concretamente en la ciudad de Bački Jarak (Vojvodina), el 13 de septiembre de 1993. En el país vecino empezó a jugar al fútbol destacando en diversos clubes locales que le catapultarían a la profesionalidad.

Su segundo apellido debería ser "Clasovic", más que nada por la clase que emana de sus botas cada vez que toca el balón. El arte balcánico del fútbol esboza una sonrisa cuando jugadores de la talla de Ivanic manejan el esférico. Es una promesa salida del deporte serbio que no tardará en llegar a una liga importante.
Su sitio preferido es el centro del campo, sobre todo para jugar como volante, por detrás de la principal línea de ataque. En ese puesto ayuda con su creación, inteligencia e imaginación. Es muy bueno a balón parado y un gran goleador.

Vojvodina fue su cuna deportiva. Allí aprendió a jugar al fútbol y de su equipo salió hecho un crack. Jugó en las categorías inferiores y permaneció así hasta 2012. Ese fue el momento en el que Mirko ya estaba preparado para estrenarse en la Superliga serbia.

En vista de que aún no estaba preparado para establecerse en la primera plantilla, el mediocampista se marchó cedido al Proleter de Novi sad, equipo en el que estuvo cedido a lo largo del ejercicio 2012\13 y en el que se produciría su eclosión.
Parece que le sentó muy bien su etapa de préstamo en el conjunto de Novi Sad. Compitió a muy buen nivel y disputó 39 encuentros en los que marcó once tantos, lo que le valdría para retornar a la vojvodina con ganas de demostrar su valía.

Ivanic empezó con fuerza la campaña siguiente. Tuvo una fantástica aparición en un partido clasificatorio de la Europa League ante el Budapest Honvéd, pero nuevamente se marcharía cedido al Proleter, para retornar nuevamente al final de temporada.

Con Branko Babić en el banquillo de la Vojvodina conseguiría asentarse en la titularidad. El joven serbio empezaría a sumar partidos y a sentirse importante dentro de la plantilla, ayudando a conquistar la Copa de Serbia en 2014 tras una magnífica campaña.
Al año siguiente fue uno de los mejores futbolistas de la plantilla y eso provocaría que muchos clubes siguiesen sus pasos. La campaña 2015\16 sería la última de Ivanic en el conjunto de Karadjordje, el cual abandonaría para probar suerte en Bielorrusia.

Fichó por el Bate Borisov el 2 de Febrero de 2016. Debutó en la Vysshaya League y rápidamente se asentaría en la titularidad del equipo, al mismo tiempo que se produciría su debut internacional con la selección montenegrina en 2017.

Lance del partido entre Polonia y Montenegro en el que Mirko Ivanic tuvo su debut. 

- Y eso que sus comicios internacionales nacieron con la selección de Serbia. Mirko Ivanic empezó jugando para el equipo Sub-21 y fue citado en 2015 para participar en el Europeo Sub-21 que se celebraba en la República Checa. Sin embargo el serbio no hizo acto de presencia y aguardó el momento de entrar en la selección de Montenegro.

El 14 de marzo de 2017 fue invitado para entrar a formar parte del combinado "Crna Gora", algo que el jugador aceptó encantado por sus raíces ancestrales. Doce días después debutaría en un partido clasificatorio de cara al Mundial frente a Polonia, partido que acabó con derrota de 1-2. Ivanic ya acumula cinco internacionalidades con el combinado montenegrino y es una de las grandes esperanzas de cara al futuro... calidad le sobra, desde luego.